Juan Florit 1900-1981




Nació en Palma de Mallorca, isla que el poeta añora con honda nostalgia. Llegó a Chile en 1909 y en 1924 obtiene un premio literario. Aunque por durante largos años no publica libros, su actividad literaria es muy intensa y es uno de los fundadores de la revista “Ariel”.
El peruano Alberto Hidalgo, Vicente Huidobro y Jorge Luis Borges lo incluyen en su antología Indice de la nueva poesía americana. Por otra parte, Alberto Guillén lo selecciona en Poetas jóvenes de América, Madrid 1930.
Juan Florit es un imaginista, con grandes recursos para pintar en verso y evocar notas Intimas o bien panoramas, personas y cosas que su mirada transforma.
El mar fue una de las pasiones del poeta y no fue menos su entusiasmo por interpretar, describir, cantar esos rincones maravillosos de las gredas pomairinas. Cabe destacar que Juan Florit vibraba con la poesía contemporánea, sin olvidar la raíz castiza de su cervantino idioma.

Obras: Poesía y Tiempo, ediciones “Hacia”, 1958. Isla de Nostalgias y otros poemas. Pomaire, 7 sonetines con greda y brujos, Buenos Aires, 1968. Zarabanda en Pomaire, 1970.

Mirando el Retrato de un abuelo

Tiene el rostro de un recio castellano.
Frente árida de arrugas. Pelo escaso.
Unas cejas que están en primer plano
en la mirada dura hacia el ocaso...

Hallé en Mallorca la que fue mi abuela.
Para mis ojos heredé sus cejas.
Mi madre, su tristeza. (Amada estela,
huella azul de ternuras y consejas.)

Es un recuerdo oscuro en el recuerdo,
mi abuelo segoviano: ¡Infancia, Isla!
Lo busco entre nostalgias, y me pierdo.
¡Tras sus cejas en sombra se me aisla!


Goleta azul

Con un leve pincel la luna pinta
de colores azules, la goleta.
Se esparcen en la noche como tinta,
moviendo su sombra, el agua quieta.

Las gaviotas se duermen en las cofas,
soñando con los peces y las olas.
(escribe un marinero unas estrofas
con romances de amor y barcarolas.)

¿Los mástiles se clavan en la nube
que pasa, suavísima, por las velas?
¿Es Percy o Titta Juan, que jarcias sube
tras mi espíritu, que otea carabelas?...

¡Azul es la nostalgia! Ella me entrega:
horizontes y puertos... la goleta,
difusa, como airón, velas despliega,
pintada por la luna y un poeta...


Romance de Alicia Bon


Para un camino extraviado
vino la muerte a invitarla.
tenía la tarde, sombras.
Alicia Bon, esperanzas.


Cruzaban el cielo triste
pájaros de largo vuelo.
Los ojos suaves de Alicia,
los encontraba el ensueño.


Alicia soñaba, lejos.
Alicia estaba en la infancia.
Jugaba alegre su vida,
como una flor y una estampa.


Pero la muerte acechaba
para invitarla a otro juego:
juego de angustia y letargo,
juego de pena y de duelo.
Murió el paisaje, la tarde,
el camino en la penumbra.
Alicia se fue durmiendo,
buscando en la muerte, cuna.


Romance de Alicia Bon,
hecho de sangre y con lágrimas.
La tarde tenía sombras.
Si corazón, esperanzas.

Esta información se encuentra en la antología de Carlos René Correa Poetas Chilenos del Siglo XX, Tomo I, Zig-Zag, Santiago de Chile, 1972.
El último poema se encuentra en la página http://www.poesias.cl/animas_y_animitas.htm y la imágen en el blog www.entreunayotraoscuridad.blogspot.com que pertenece al poeta Andrés Florit, sobrino nieto de Juan Florit. A él mis agradecimientos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...